Durante toda su carrera Britney Spears ha
enfrentado diversas demandas por muchas razones pero nunca una como la que
recientemente se le interpuso por no acudir a una fiesta infantil.
Resulta que los padres de uno de los compañeritos de escuela de los
hijos de la Princesa del Pop hicieron el coraje de su vida después de que la
cantante confirmara su asistencia con los pequeñines al evento y después
cancelara de último momento.
Y es que los señores habrían reservado parte de Disneylandia
para celebrar a su chamaco, cuyas entradas
VIP pasaban de los 400 dólares por persona, por lo que alegan que fue dinero
tirado a la basura. Por su parte, Britney Spears se
limitó a decir “lo siento” y enviarles pases de cortesía para su show en Las
Vegas. ¡Más perra!
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